Upata es una ciudad venezolana ubicada en el interior del macizo de Guayana. Es la capital y población más importante del municipio Piar, en el Estado Bolívar. Se encuentra situada entre las cuencas de los ríos Orinoco y Cuyuní.El nombre de Upata es un vocablo indígena, probablemente de la etnia Kamaracoto, que significa en castellano "Rosa de la Montaña" o "Rosa del Bosque".
Es la tercera ciudad de la región Guayana, después de Ciudad Guayana y Ciudad Bolívar.
Se sabe que el primer intento de fundación de Upata se hizo hacia 1739, con el nombre de Nuestra Señora de la Candelaria, como lugar para el cultivo de la tierra por parte de labriegos isleños (canarios). Sin embargo, fue el 7 de julio de 1762, cuando Fray Antonio de Cervera fundó la ciudad con el nombre de Villa del Yocoima de San Antonio de Padua, en honor al santo italiano de Padua, cuando los misioneros capuchinos ingresaron la fe católica a la región.
Upata es capital del Municipio Piar del estado Bolívar. Su principal fortaleza económica es su potencial agropecuario de ganadería vacuna de carne y leche y sus suelos aptos para el cultivo de la yuca, el ocumo, ají dulce, pimentón, tomate, cítricos, aguacantes, mangos, granos oleaginosos y maíz. Las zonas cercanas a Upata son, por características, propicias para la ganadería. La economía de Upata también se sustenta en la producción lechera y en la elaboración del queso típico de Guayana, conocido como queso de mano, queso telita, queso guayanés y queso de cincho o queso duro así como el sector de la madera donde se encuentran 7 aserraderos.
Upata también se destaca por sus bellezas naturales, entre ellas: La Piedra de Santa María, el Cerro El Toro, los acuíferos de La Carata, las Cuevas de Timoteo en el Cerro El Jobo, el Cerro El Corozo, y el Cerro Guacarapo donde se encuentra el Monumento a la Virgen de La Paz.
Upata es la tercera ciudad en importancia del estado Bolívar, su población estimada en la actualidad es 150 mil habitantes. El municipio Piar del cual es capital, cuenta con una extensión de 15.899 Km2. Está ubicada a 355 metros sobre el nivel del mar y su clima es de sabana tropical. A la izquierda de los límites del municipio Piar se encuentra el lago artificial originado por la construcción del Complejo Hidroeléctrico del Gurí.
En sus 248 años la realidad es que la villa del yocoima se encuentra en un abandono absoluto por parte de las autoridades nacionales, regionales y municipales. El nivel de desempleo es de un 20% y cuenta con un déficit habitacional de 5000 viviendas, la casa de la cultura abandonada y sin respuesta alguna. No tiene un polideportivo, las canchas deportivas en absoluto abandono, no tiene un terminal de pasajeros digno de una ciudad en crecimiento, no tiene un mercado municipal acorde a las necesidades del crecimiento poblacional de la ciudad. No tiene señalizaciones acordes a una ciudad organizada y no cuenta con un plan rector municipal como eje fundamental del crecimiento organizado y sostenido para el progreso y futuro de la ciudad. No tiene espacios abiertos y cerrados para la distracción de los niños, niñas y adolescentes, no tiene una sede de la fiscalía, no tiene una sede del Cicpc, no tiene una sede cantv.
No hay ningún plan de expansión de vías alternas al caos vehicular que se presenta diariamente en el centro de la ciudad, a la vuelta de unos pocos años va a ser insostenible el tráfico vehicular por las principales vías del centro de la ciudad. y qué decir del sistema de transporte público en absoluto desorden y sin una política clara para la modernización de las unidades y la implementación de un sistema en red de tráfico controlado tanto del sistema público como del particular.
El nivel de inseguridad reinante es preocupante las estadísticas así lo determinan. Poblacionalmente Upata es la ciudad con mayor número de secuestros al año en comparación a ciudades con la misma cantidad de habitantes en el país: 18 secuestrados en los últimos 7 años así lo determinan, igualmente tenemos en promedio 26 asesinatos al año, el comercio general de Upata ha sufrido en los últimos años atracos, robos y hurtos de una forma sostenida y con tendencia a crecer. Tenemos una policía municipal atrasada, mal pagada, mal dotada y sin herramientas mínimas de funcioamiento, La inseguridad es sin duda alguna el mayor problema que tenemos los upatenses.
La realidad económica no es distinta, el sector forestal ha sufrido un decrecimiento sostenido en un 70% de la producción de todos sus productos forestales (maderas aserradas y sus derivados) producto de políticas erráticas del gobierno central y las enormes preferencias que le han dado al sector forestal brasileño para la importación de maderas al país. Perjudicando sustancialmente el mercado nacional y a la familia upatense. el sector agroindustrial sencillamente brilla por su ausencia no hay políticas claras de financiamiento y estimulo al sector agroindustrial en pocas palabras no hay voluntad política para tales efectos.
El sector comercial se ha visto afectado notablemente por la situación reinante en las empresas básicas de Guayana, combinada a la caída del PIB venezolano lo que representa una caída de un 30% en las ventas generales del comercio upatense. El gobierno municipal en vez de estimular a los sectores económicos de Upata y el municipio. Ha sacado la espada de Damocles para cobrar más impuestos municipales donde por ejemplo los aumentos de las patentes de comercio y el derecho de frente han sufrido aumentos que llegan hasta de
16.000% en el caso del derecho de frente. Entendemos que es necesaria la modernización del catastro del municipio, pero el gobierno municipal debe entender que el comercio general del municipio no pasa por su mejor momento. El dialogo no es suficiente, el otorgamiento de permisos de construcción tampoco es suficiente. Estamos a la espera igualmente que le sea entregada al comercio informal del centro de la ciudad, una sede que tiene 3 años en construcción y no ha sido terminada.
La alcaldía de municipio piar parece una bodega de los años 40. no cuenta con una plataforma tecnológica acorde a la modernidad política de gestión pública. Lo que hoy se define como gestión publica 2.0.los procesos administrativos necesitan ser transparentes, justos, equilibrados y de fácil acceso a los ciudadanos, donde debe prevalecer la información a la ciudadanía de todas y cada una de las actividades del ayuntamiento municipal y los procesos de licitación, compra de bienes y servicios, contratación de obras públicas y los informes públicos en el desempeño de los funcionarios de la alcaldía.
Hay una deuda histórica con Upata y el Municipio: un plan rector municipal. en reiteradas oportunidades vengo alertando a los gobiernos de turno y a la ciudadanos del municipio que los ingresos del municipio por concepto de los organismos del estado tales como: fides, lae y lo que corresponde con el situado constitucional son insuficientes, el cálculo para tales efectos es en base a 85.000 habitantes cuando en términos reales superamos en casi el doble esa cantidad poblacionalmente hablando, Upata y el municipio ha crecido en población pero no en industrialización e ingresos. No tenemos industrias pequeñas, medianas y grandes en los diferentes sectores de la economía que permitan el progreso y una recaudación fiscal municipal óptima capaz de ser retribuida en asfaltado, embellezimiento y ornato, educacion, cultura y deporte. A nuestra ciudad.
Los servicios públicos dan pena ajena, enormes colas para que los ciudadanos adquieran sus bombonas de gas, un servicio de agua pésimo, irregular y deficiente, un servicio de luz pésimo plagado de cortes que no son notificados a la colectividad a tiempo y que han generado pérdidas incalculables en los hogares y en el comercio upatense. Un servicio de aseo urbano atrasado y carente de unidades recolectoras de basura. Upata no cuenta con una política de contenedores y cestas de basura a lo largo y ancho de la ciudad. Y mucho menos políticas claras en cuanto a la orientación y concientización a no ensuciar y mantener una ciudad siempre limpia.
En el 2012 Upata va a tener 250 años de fundada y estoy seguro que dicha celebración no va a pasar de una fiesta, un templete y uno que otro discurso hipócrita con fines electoreros de falsas promesas y de muchísima demagogia política.
A sus 248 años de fundada estamos lejos muy lejos de ser una ciudad prospera, moderna, segura, planificada y proyectada al futuro.